Abogados expertos en recurrir multas de tráfico

Las multas de tráfico son el castigo que se impone a las personas que cometen infracciones de tráfico. Tienen un plazo de caducidad, que es el período de tiempo durante el cual se puede imponer la multa. En España, el plazo de caducidad de las multas de tráfico es tres meses en el caso de las infracciones leves y en seis meses en el caso de las infracciones graves o muy graves y de cuatro años para las sanciones económicas y de un año para el resto de multas, como los trabajos en beneficio a la comunidad. El plazo de caducidad comienza a contar desde el día siguiente a la fecha en que la multa se declara firme.

Si has recibido una multa de tráfico y quieres presentar una alegación, puedes hacerlo tú mismo (o bien la persona titular del vehículo con el que se ha cometido la infracción, en caso de que no haya sido identificado el responsable de la misma por un agente de la autoridad) o puedes designar a otra persona para que actúe en tu representación. Para designar a un representante, puedes utilizar el Registro de apoderamientos de la Dirección General de Tráfico (DGT) de España o puedes presentar una autorización firmada por ti. Si decides presentar la alegación de forma presencial, debes llevar contigo un documento de autorización firmado por ti y el DNI de ambas personas (tú y tu representante).

El derecho al descuento por pronto pago de una multa de tráfico está establecido en el artículo 37.1 del Reglamento General de Conductores. Este artículo establece que, si se realiza una alegación contra la multa, se pierde el derecho al descuento por pronto pago. Esto significa que, si presentas una alegación contra una multa de tráfico y esta alegación es rechazada, no podrás beneficiarte del descuento por pronto pago y tendrás que pagar el 100% de la sanción.

Si la Dirección General de Tráfico (DGT) desestima la alegación que has presentado contra una multa de tráfico, tienes dos opciones:

• Aceptar la decisión de la DGT y pagar la multa en el plazo establecido.
• Interponer un recurso contencioso-administrativo por la vía judicial. Este recurso deberá presentarse dentro de los dos meses siguientes a la notificación de la decisión de la DGT.

Para la vía judicial necesitarás un abogado y procurador.

Una multa de tráfico puede ser considerada nula por diversas razones. Algunas posibles causas de nulidad de una multa de tráfico son:

• Si la multa se ha emitido de forma incorrecta o ilegal. Por ejemplo, si la multa se ha emitido sin que haya sido notificada en el plazo establecido por ley, o si se ha emitido sin que haya sido firmada por el agente que la ha impuesto.
• Si la multa se basa en pruebas o circunstancias que no son válidas o que no se han probado de forma adecuada. Por ejemplo, si la multa se basa en una fotografía de un radar que no muestra de forma clara la matrícula del vehículo o el conductor, o si se basa en un testimonio que no es fiable.
• Si la multa se ha emitido por una infracción que no existía en el momento en que se cometió. Por ejemplo, si se ha emitido una multa por exceso de velocidad en una carretera donde no había límite de velocidad establecido.

Si crees que tu multa de tráfico es nula por alguna de estas razones o por cualquier otra, te recomiendo que consultes a un abogado especializado en derecho de tráfico para que te asesore sobre tus opciones y te ayude a presentar una alegación o un recurso en caso necesario.

Si has presentado una alegación contra una multa de tráfico y no has recibido respuesta por parte de la Dirección General de Tráfico (DGT) o en el Ayuntamiento correspondiente en el plazo establecido por ley:

1. Comprueba que la alegación se ha presentado correctamente. Asegúrate de que has enviado la alegación a la dirección correcta y que se ha presentado dentro del plazo establecido.
2. Contacta a la DGT o quien ha emitido la multa para asegurarte de que han recibido tu alegación y para preguntarles cuándo esperas recibir una respuesta.
3. Presenta una nueva alegación. Si no has recibido respuesta a tu primera alegación y ya han pasado varios meses, es posible que la alegación se haya perdido o que haya sido archivada de forma incorrecta.
4. Considera la posibilidad de interponer un recurso contencioso-administrativo.