Al no tener como pagar, muchos deudores esperan que sus obligaciones financieras pasen desapercibidas con el paso del tiempo. Pero, ¿es eso posible? ¿Cuándo prescriben las deudas en España? Aquí te contaremos lo que debes saber.
¿Cuándo prescriben las deudas? Plazos según el tipo
Es bien sabido que no se exige la misma documentación para un crédito hipotecario que para un coche. De la misma forma, estas deudas no prescriben de igual manera. De hecho, su caducidad dependerá del tipo y si es de carácter público o privado.
Deudas personales
Aquí entran todas aquellas deudas que se adquieren por los créditos de libre inversión, compras con tarjetas y similares. Todos estos tipos de obligaciones financieras no cubiertas prescriben a los 5 años.
Este es el tipo de deuda más común entre los ciudadanos españoles. ¡No hay que dejar aumentar los intereses, esperando que la deuda prescriba! Lo mejor es buscar un asesor para eliminar este tipo de problema.
Deudas hipotecarias
Estas son, quizá, las más utópicas para que lleguen a la prescripción. Y no es para menos, ya que tardan la nada despreciable cifra de 20 años en caducar.
Es poco probable que pasen dos décadas sin que el banco interponga comunicación alguna reclamando la deuda. Por lo tanto, te recomendamos que, si tienes una deuda hipotecaria que no puedes pagar, acudas a un abogado experto en la Ley de la Segunda oportunidad. Con esta puedes renegociar o cancelar tus deudas.
Incluso, un experto en leyes y temas hipotecarios puede determinar si tu contrato posee cláusulas ilegales, para que reclames.
Deudas con Hacienda y la Seguridad Social
Las deudas con entidades gubernamentales siempre han sido un dolor de cabeza para la ciudadanía española, porque fueron las más difíciles y complejas de erradicar. Hasta ahora.
La jurisprudencia nos ha sorprendido a todos este año, ya que hay nuevas disposiciones en la Ley de la Segunda Oportunidad, que permiten la eliminación de estas deudas y no sólo por prescripción.
Pero, bajo la circunstancia de tiempo, las deudas con Hacienda y Seguridad Social no pueden ser cobradas después de transcurridos 4 años.
Esto suena muy bien, cuando se lee desde lo que dicta la ley. Pero en la práctica, hemos notado que son pocos los casos en los que realmente ocurre la prescripción. Con la notificación constante que realizan estas entidades, es suficiente para que nunca se cumpla el plazo de tiempo requerido.
Pero tienes más opciones. Como lo mencionamos anteriormente, la Ley de la Segunda Oportunidad se transformó, ofreciendo herramientas más efectivas para los deudores. Entre ellas, se destaca que ahora es posible obtener el perdón de hasta 10.000 euros con cada una de estas entidades. En otras palabras, ¡puede cancelar hasta 20.000 euros de deuda!
Deudas por suministros
Las deudas por suministros tienen un plazo de prescripción de 5 años. Pero, de nuevo, no es muy común que a los prestadores de este tipo de servicios se les olvide emitir y enviar la respectiva factura, la cual cuenta como una comunicación directa.
Deudas por impuestos municipales
Las deudas de tipo tributario o que se contrae con administraciones municipales también tiene un periodo de prescripción, que consta de 4 años.
¿Puede interrumpirse la prescripción de una deuda?
Efectivamente, puede interrumpirse la prescripción de una deuda. El acreedor puede lograr esto con tan solo emitir un burofax o un mensaje a su prestatario, con la intención de cobrar.
También se detiene la prescripción cuando se utilizan mecanismos judiciales para cobrar la misma, como lo son las demandas con finalidad de embargo.
¿Qué deudas no prescriben nunca?
En materia judicial, se puede hablar que no prescriben nunca las deudas por demandas alimenticias, las deudas por divisiones de herencias o las generadas por el deslinde entre propiedades contiguas.
Pero, como hemos observado, puede que las deudas de otro tipo nunca lleguen a prescribir, por el simple hecho de que el acreedor notifique a su deudor sobre el compromiso no satisfecho. Siendo así, lo mejor es buscar maneras realistas de deshacerse de esas obligaciones económicas que no se pueden asumir.
¿Cómo puedo cancelar una deuda? La Ley de la Segunda Oportunidad
Es nuestro deber destacarlo: es posible que las deudas nunca prescriban. Y la razón, como la expusimos líneas arriba, es debido a que detener el lapso de tiempo es bastante sencillo.
A ello se le suma el hecho de que los acreedores pueden tomar acciones judiciales en cualquier momento, generando embargo. Por lo tanto, esperar a que una deuda simplemente desaparezca diluida por el transcurso del tiempo, no es la opción más idónea.
En su lugar, una vía más estratégica es buscar la ayuda de la Ley de la Segunda Oportunidad. ¡Mas aún cuando, actualmente, ayuda a eliminar deudas con entidades como Hacienda y Seguridad Social!
Si te encuentras en una situación donde no puedes asumir el pago de una deuda, esta ley será tu respaldo: puedes llegar a un acuerdo con el acreedor gracias a ella y no perder todo tu patrimonio.
Por si fuera poco, si la insolvencia es mucha, un abogado puede convencer al juez de perdonar todas aquellas obligaciones crediticias que no es posible asumir, otorgando el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho, BEPI, de forma definitiva.
En resumen, las deudas en España prescriben de acuerdo a su naturaleza y tipo, pero es difícil que realmente suceda, ya que los acreedores rara vez renuncian a su derecho a cobrar. Consideramos que la mejor estrategia para eliminar de una vez por todas esas deudas que no cesan de cobrarte y no puedes pagar por tu situación, es buscar el amparo de la Ley de la Segunda Oportunidad.
¡Podemos ayudarte! Te asesoramos con tu caso de deudas y seguro que hallamos una manera de que te eximan del pago de la mayor cantidad de ellas. ¡Contáctanos!